El día del bisoñé
Semanas
antes se calientan motores, en los medios locales se hacen
manifestaciones, unos llaman a los otros usurpadores de la historia,
los otros responden que están fuera de la realidad. Los “para que
no me olvides” y los “me cuesta tanto olvidarte”, empiezan a
mandarse felicitaciones de navidad, y a preparar el encuentro; como
tradicionalmente deben hacerse las cosas entre familia.
La
esencia del granadinismo, la malafolla granatensis, el día de la
toma, está servido. En un bando los fachas, los “no te olvidamos
Paco”, los “tomo nota”; en el otro, los republicanos,
independentista, anarquistas, perros flautas, alternativa social, los
“no olvido”. Es la forma que tiene Granada de anunciar que
próximamente será carnaval. Como pájaros, por andanadas, unos a
otros se insultan: cántanos algo Paquito..., ¿por qué no te
callas...?, echaros betadine..., ducharos que sale económico...;
sapos y culebras por la Plaza del Carmen, bajo la atenta mirada,
vendada, del hombre que sostiene el tiempo, sobre un caballo de
bronce. Los granadinos y visitantes presenciamos el espectáculo de
todos los años, mientras esperamos el número final a modo de
fanfarria. No hay nada mejor para este día, que ir a olisquear que
se cuece este año en el show del Bill Cosby español. Nada mejor
para empezar el año, que meterse en el bullicio, ver caras de
sociedad, engalanarse, perfumarse, disfrutar de una mañana de sol y
nieve, y por supuesto... echar unas risas; presenciando este circo
tan divertido que es nuestro particular 2 de Mayo.
No
hay parangón que supere al arte del insulto granatensis, donde el
más puro y cultivado arte del insulto y el desprecio mutuo, llega a
su máximo esplendor. Mientras, los granatensis esperamos pacientes
al pendón, enarbolado desde el balcón de nuestro amado ayuntamiento
por la autoridad agraciada; esperando aquello de: ¡¡Granada!!
¿¿Qué??? ¡¡¡Granada !!! ¿¿Qué??
Y nos
vamos a tomarnos unas cervecillas, mientras nos partimos el ojal de
risa silenciosa. Viva la chicotá, viva la chirigota, vivan las
moras y los arándanos, vivan los zánganos y los tabardillos, y
viva Carlos Cano siempre en la memoria. El show de la Toma. Como el
bueno de Pulgoso. Viéndonos, otro año más, en los informativos, en
primera línea, como debe ser; magos del ingenio y el humor negro,
del insulto inteligente y rebuscado, del hiriente zarpazo envenenado,
a ritmo de pasodoble español la orquesta, el ejercito, palmas,
vivas, aplausos, gritos de fuera... fuera..., vergüenza...
vergüenza..., a ritmo de pasodoble y olé. La cohorte de disfraces
llega y, el Brujo y el Che echando fotos, y el himno de Granada de
Lara sonando: el embrujo de unos ojos moros...; y policías de
resaca, y silbidos... y palmas..., himno de Andalucía, himno de
España, manos alzadas, fuera... fuera..., y aplausos... y
aplausos...
Por
unanimidad, el jurado de este concurso ha proclamado como ganador de
este año al insulto más original e ingenioso, al realizado por el
portavoz del grupo de los “no olvidamos”, que dice así: -Baja
el brazo que te huele la gaviota-. Mañana encantadora, a esperas de
la noche mágica del lunes, la cabalgata de Reyes más antigua de
España.
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